Trastornos curiosos
Trastornos curiosos X: Síndrome de la mano extraña, un alienígena en nosotros.
viernes, abril 22, 2016
Imagine
que las distintas partes de su cerebro estuvieran desconectadas, sin que entre
ellas hubiera comunicación, por lo que una de estas áreas, por ejemplo, moviera
su mano de forma autónoma, sin que el resto del cerebro tuviera conciencia de
ello.
Sus
ojos advertirían espeluznados cómo, de repente, su mano derecha desabotona su
camisa, golpea el reposabrazos del sillón o alza un tenedor.
Tendría la terrible y desconcertante impresión de que esa mano, la suya, no pertenece a
usted, si no que es un ente autónomo, con conciencia propia, que toma
decisiones unilaterales.
Este
inquietante sentimiento es el que viven a diario los afectados por el Síndrome de la
mano extraña, Síndrome de la mano ajena (SMA),Síndrome de la mano alienígena o, en su acepción médica, Síndrome del Dr. Strangelove, descrito por
primera vez en 1908 por el médico alemán Kurt
Goldstein, un trastorno psicológico de origen cerebral que tiene diferentes
variantes en función del tipo de daño cerebral que ha sufrido el paciente.
- El daño en el cuerpo calloso y en el lóbulo frontal puede producir acciones involuntarias e inteligentes en la mano no dominante del paciente; por ejemplo, en el caso de una persona diestra, su mano izquierda aparentará cobrar vida propia, realizando acciones complejas como asir objetos, moverse de forma coordinada y con un fin determinado, o incluso en los casos más problemáticos golpear o flagelar el propio cuerpo del paciente.
- Daños en la corteza cerebral pueden provocar movimientos involuntarios y descontrolados, de cualquiera de las manos del paciente, del estilo de espasmos motores.
- Los movimientos más complejos de la mano extraña son generalmente asociados a tumores cerebrales, aneurisma o traumatismo cerebral.
Es obvia la
problemática inherente a este trastorno, que en casos graves llega a
incapacitar al paciente, limitando su vida en todas las áreas, personal,
laboral, académica, etc.
Se conocen
descripciones de casos realmente extravagantes, como los relatos de aquellos
pacientes que tienen dificultades para poder salir de una habitación porque
mientras con una mano abrían la puerta, la opuesta la cerraba.
Más graves aún
son los casos en que la mano que el paciente percibe como extraña intenta
estrangularle o clavarle un arma blanca, poniendo en peligro su propia vida;
como en el famoso caso de una norteamericana de 81 años, cuyo informe médico
fue publicado en
una edición de la revista Journal of Neurology, Neurosurgery &
Psychiatry, en 1998.
Esta paciente, hospitalizada por un caso de demencia,
relató cómo poco a poco su mano izquierda dejó de obedecer hasta
que comenzó a atacarle, primero con golpes leves y después hasta incluso intentar ahorcarla.
Lo interesante de este síndrome es que el paciente es consciente de los actos de la mano aliénigena, tratan de pararlos, pero son impredecibles por lo que no lo logran.
No
existe tratamiento en la actualidad para los afectados del Síndrome de la mano
fantasma, pero sí se conocen formas rudimentarias de evitar el incordio de
este trastorno, tales como mantener la mano afectada ocupada, sujetando un
objeto, lo que suele mantener el miembro en reposo.
Cuando estamos sanos, libres de enfermedades o trastornos que afectan nuestro cuerpo y mente, solemos olvidar lo complejo y valioso que es el equilibrio de nuestro organismo.
Las
personas que sufren trastornos como el descrito hoy, tienen un cambio de
perspectiva vital forzoso y brutal, reaprendiendo a vivir en una nueva
realidad, como un mundo paralelo dentro de nuestro propio mundo, lleno de
personas que luchan contra extrañas enfermedades, demasiado olvidadas por su
baja incidencia en la población.
La
investigación de este tipo de trastornos abre nuevas vías de conocimiento sobre
nuestro cerebro y su funcionamiento, tan valiosas para los afectados como para
el resto de seres humanos en nuestro afán por entender nuestra propia
existencia.
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